Descripción breve
Relación entre la población y la superficie del territorio, generalmente expresada en habitantes por quilómetro cuadrado.
La presión urbana ejercida sobre un territorio está directamente relacionada con la concentración demográfica. El incremento de población en un determinado territorio incrementa el consumo de recursos y la emisión de contaminantes al medio ambiente, alterando el funcionamiento de los ecosistemas.
Fórmula de cálculo
a/b
Variables
a) total de habitantes (hab.)
b) superficie del territorio (km2)
Unidades
hab./km2
Fuentes
INE España; INE Portugal; IGP; IGN; EEA
Análisis breve
Gráfico 2 - Variación de la densidad poblacional observada entre 1998 y 2009 (hab./km2).
Entre 1998 y 2009 se verificó una tendencia de incremento de la densidad poblacional en España, Portugal, la eurorregión y Europa (UE-27) que registraron valores de crecimiento de un 15%, 5%, 4% y 4%, respectivamente (Gráfico 2).
Figura 2 - Densidad poblacional en los municipios de la eurorregión en 2009 (hab/km2).
En la eurorregión se verifica un fuerte contraste entre la franja atlántica y las tierras del interior (Figura 2). En el primer caso, se observan altas densidades poblacionales y, en el segundo caso, las densidades son, por lo general, bajas. Esto pone de manifiesto la capacidad de atracción de la población de los mayores y más desarrollados centros urbanos que se sitúan en el litoral, donde se registran los mayores porcentajes de variación de la población residente en comparación con las zonas del interior (Figura 3).
Figura 3 - Variación de la población residente en los municipios de la eurorregión entre 1998 y 2009 (%).
Salvo algunas ciudades (Chaves, Vila Real, Lugo y Ourense) que han crecido en términos poblacionales, los ayuntamientos del interior han sufrido un creciente abandono de sus poblaciones en dirección a las grandes ciudades, sobre todo a las del litoral. Como consecuencia, en las últimas décadas se ha acentuado la concentración poblacional en las áreas metropolitanas de Oporto, Vigo y A Coruña, donde reside cerca del 39% de la población de la eurorregión (Figura 3).
A pesar de que Europa es el segundo continente con menor superficie del mundo, tiene una población bastante numerosa que se distribuye de una forma muy desigual en el territorio (Figura 4), observándose países con una gran concentración de la población como es el caso de Malta (1313 hab/km2), Holanda (488 hab/km2), Bélgica (356 hab/km2), Reino Unido (254 hab/km2), Alemania (230 hab/km2) e Italia (204 hab/km2) y otros con una baja concentración de la población como es el caso de Finlandia (17 hab/km2), Suecia (22 hab/km2), Estonia (31 hab/km2) y Letonia (36 hab/km2).
Figura 4 - Densidad poblacional en 2009 en la eurorregión y en la UE-27 (hab/km2).
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