Realizar un pesado de todas las referencias del almacén para ajustar el pesaje y por consiguiente evitar sobrepesos, caídas y roturas. Introducir todos los datos necesarios en el maestro de artículos que permita tomar decisiones sobre posibles mejoras en función de cantidades y de costes. Rediseñar el lay-out del almacén en función de los datos recogidos. Con todas estas medidas que nos han permitido mejorar sensiblemente nuestra operativa en el almacén, se ha evitado sobrepesos, caídas y roturas, y, por tanto, hemos reducido la cantidad de residuos peligrosos que se generaban.