Según mostraba su último censo de Ouagadougou, la capital política de Burkina Faso, el 10% de su población pertenece al sector informal de la economía. Eso explica la importancia del pequeño comercio en la ciudad. Por otro lado, la fuerte presencia del sector informal se refleja en el aumento de ocupaciones ilegales de suelo que amenazan con convertirse en un problema para la gestión urbana y particularmente para la organización del trafico.